martes, 8 de mayo de 2007

LA FALTA QUE HACES TU

Un Día desperté
y me di cuenta que era nada
Comparado a tu ausencia
Fui la minúscula humanidad
ante el escote de tu intimidad

Yo era, no se, tu sabes…
quizá la Nada
Antes que tú llegaras
me creía un ser perdido
Un viento sin brisa,
un estático remolino
Tu fuiste la magia que lleno mi existencia.

Tu eras la primavera en septiembre,
el ángel que cuido mi espacio y lo doto de una razón

Yo era la nada
– ¿te acuerdas?-
Hasta que llegaste y mirándome tocaste mi mano
Y confesaste que envejecerías conmigo
hasta el final del atardecer
Hoy nada de eso queda aquí…
¡Maldita sea ¡